Post críptico número cuatro
Y al moverse así, ejerció la fuerza necesaria para saciar todos sus instintos marsupiales. Nadie podría adivinar que en realidad se trataba del horrible acto de cantar narcocorridos.
Le atendió Taquero Narcosatánico como a eso de las 5:48 p.m.
Etiquetas: Niño poeta entablando una conversación con un pato (en un barco volador), No soy cool
7 comentarios:
y luego cuando desperto el dinosaurio ya no estaba junto a la cama,,,
y te habia dejado un gran pedazo de.......
Hahaha, lo chingón es que tu post corresponde bien vergas con las características de un norteño.
Los que cantan narcocorridos son koalitas, ya que dices marsupiales y esas madres pachecas son marsupiales, y los que cantan narco, también se monean...
Ya rodee un chingo mi comment, te la rifas cabron.
miau
marsupial? buen post
Tu siempre hablando del sexo anal.
No... cuando hago palomitas generalemente tarareo canciones de Elvis.
como cuando termina la taza...
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